Enfoque

EDUCACIÓN FÍSICA
Tomado de: Documento para las Áreas de Formación de Educación Media General para el Año Escolar 2017-2018. (MPPE Junio 2017).

En el proceso de consulta que se realizó en el marco del cambio curricular, los y las docentes coinciden en que el área de Educación Física es fundamental para formar en la salud, tanto individual como colectiva, la cual debe conocerse y practicarse. Va dirigida a la prevención, y debe dársele importancia a la actividad física como herramienta para la "formación física" del ser humano. También se enfatiza en que esta área debe brindar oportunidades para promover los valores de respeto a la vida, del reconocimiento de sí mismos y mismas como personas y como parte de una familia y de una comunidad; para revertir antivalores tales como el egoísmo, la desvalorización de la mujer, el endorracismo, la vergüenza étnica y la subestimación derivada de las diferencias físicas, sociales, entre otras; promover la solidaridad, la honestidad y el respeto a las diferencias. Así mismo, la mayoría coincide en darle importancia a la formación en primeros auxilios, prevención y educación ambiental. Por último, aunque valoran la práctica de la actividad física, hacen énfasis en la formación teórica de la misma; es decir, que los y las estudiantes conozcan el qué, el porqué y el para-qué de la educación y las actividad físicas.
El énfasis de la actividad física y la salud física en esta área de formación pasa por superar la concepción meramente deportiva que impera en nuestro país, muy promovida por décadas en muchas de nuestras universidades, por "la fuerza de la costumbre" en nuestras instituciones educativas y por las exigencias a los y las docentes del área en la participación en juegos deportivos de competencia y en la captación de talentos. En un segundo orden, pero no menos importante, es necesario resaltar que la escuela, con currículo fraccionado y atomizado, no ha permitido un proceso integrado con las demás áreas de formación, dificultando el compartir de saberes, la complementariedad y el trabajo inter- y transdisciplinar que les facilite a los y las estudiantes la comprensión de la actividad física para la salud integral, el buen vivir y para la formación de ciudadanía.
Es necesario destacar que el área de Educación Física es un área práctica con basamento teórico; debe crear condiciones para fortalecer el hábito de la práctica sistemática de actividades físicas. De hecho, esta condición se reconoce en la Ley Orgánica de Deporte, Actividad Física y Educación física (2011), al establecer tres sesiones semanales de Educación Física en las instituciones educativas del país en todos los niveles y modalidades. Es un espacio humano donde se brinda felicidad y el mayor repertorio de vida en valores individuales y colectivos (crear condiciones para vivencias significativas; con tareas, dinámicas, metodologías dirigidas a la identidad y la formación en valores; donde se promueva la inclusión y participación). Por lo tanto, se propone que la educación física también esté involucrada en todas las actividades de la vida escolar y en cada uno de los eventos del año escolar, participando activamente, por ejemplo, en desfiles, semana aniversario, comparsas en carnaval, actividades recreativas de la escuela con su comunidad, fiestas tradicionales, encuentros deportivos entre escuelas cercanas (del circuito educativo o alrededores), con compartires sociales y culturales. Así mismo, se proponen actividades relacionadas con la educación ambiental y con la ocupación sana del tiempo libre, tales como excursiones, paseos dirigidos, caminatas, bailoterapias, circuitos recreativos, entre otros.
En el ámbito mundial existe un reconocimiento auténtico hacia la educación física al considerarla como una de las vías más realistas para que las personas desarrollen su personalidad y se apropien de una cultura favorable hacia la práctica sistemática de la actividad física para preservar la salud.
En la Carta Internacional de la Educación Física y del Deporte (Unesco/1978), en su artículo 1.º, se establece que "es un derecho fundamental de todos" y que en el ejercicio de este derecho "se han de ofrecer oportunidades especiales a los jóvenes, comprendidos los niños de edad preescolar, las personas de edad y las personas con deficiencias, a fin de hacer posible el desarrollo integral de su personalidad, gracias a unos programas de educación física y deporte adaptados a sus necesidades".
La educación física, de acuerdo con este planteamiento, es entendida como un derecho esencial de toda persona; en este sentido, su puesta en práctica debe dar respuesta a las necesidades e intereses de la población a atender y ofrecer actividades físicas variadas para beneficiar la formación integral y la personalidad de las ciudadanas y los ciudadanos. Esto fue ratificado una vez más en la V Conferencia Internacional de Ministros y Altos Funcionarios Encargados de la Educación Física y

Deporte MINEPS V (Unesco, 2013). En el artículo 111 de la CRBV se reconoce a la educación física y al deporte como fundamentales en la formación integral de la niñez y la adolescencia y como política de salud pública; así mismo, en la Ley Orgánica de Deporte, Actividad Física y Educación Física (2011), en su artículo 56, se puntualiza que la educación física y el deporte "son materias obligatorias en todas las modalidades y niveles del Sistema Educativo Nacional... ministerios del Poder Popular con competencias en materias de deportes... fijarán conjuntamente los planes y programas de estudio". En atención a este artículo se refuerza que la educación física es materia indispensable para la formación integral de todas las personas en el sistema educativo y el Ministerio del Poder Popular para la Educación es el ente responsable de garantizarlo, a través de los planes y programas en esta área de formación, siendo imperativo que tales planes y programas se conciban en función de las necesidades y características personales de los y las estudiantes, así como también de las condiciones institucionales, entre otros aspectos, para crear hábitos y comportamientos favorables al desarrollo pleno de la persona.